(por Miguel)
Desde que estoy contigo,
los días se hicieron semanas,
Semanas que se convirtieron en meses.
Meses que se han vuelto años.
Años que pasamos juntos
y de los que nunca nos cansamos.
Hemos compartido miles de momentos,
miles de risas, de sonrisas,
y alguna lágrima.
Después de todo y de tanto,
me alegro de estar a tu lado.
Me alegro de estar contigo.
Después de todo y de tanto,
te quiero a mi lado.
Te quiero conmigo.
Pero todo esto no tiene sentido,
si no cuento contigo.
Por eso, y por todo esto:
¿Quieres casarte conmigo?